No escondo la fascinación que me producen los forcados. Hombres a cuerpo limpio que miran a los ojos a los toros. «Touro, ¡uh!». Los brazos en jarro a la cintura, andando con la parsimonia y la elegancia de un fado. Con suavidad y delicadeza. El cite. No se arranca, más cerca. Cada paso hacia delante va contra el instinto de supervivencia del ser humano. -Forcados de Evora-.
El barrete es la prenda de la farda más apreciado por los forcados. Una suerte de barretina que pasa de generación en generación, herencia y tradición. Orgullo de sus antepasados que desde el siglo XVII se juegan la vida sin engaños. Forcados por pasión, jamás por dinero.
A Cuéllar llegaron los Forcados de Evora, uno de los grupos amadores más importantes de Portugal. Mis respetos. Antonio Prazeres, Tomas Dias y Henrique Burguete fueron los forcados de cara que arriesgaron su propia integridad por firmar tres pegas de máxima emoción y riesgo.
La crónica de Marcos Sanchidrián: Puerta Grande para Sergio Galán y Guillermo Hermoso
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La corrida de rejones de la feria de Cuéllar llevó al público a la plaza. Una gran noticia para la localidad segoviana que además vivió una tarde vibrante donde salieron en hombros Sergio Galán y Guillermo Hermoso de Mendoza, dejó una grata impresión el joven Adrián Venegas y pusieron la nota de emoción los Forcados de Évora con tres pegas heroicas. La buena corrida de Fuente Ymbro, poco habitual en este tipo de festejos (remendada con uno de El Canario), puso la guinda gracias a su prontitud, nobleza y buena condición -además de embestir de categoría en los capotes de los auxiliares-.
VERDAD, es una suerte que me queda lejana, pero que me emociona y que tiene Verdad.